Continuar con la lactancia al regresar de la licencia por maternidad es todo un desafío, pero con información y apoyo es posible. La leche materna es el único alimento que necesitan los bebés hasta los 6 meses y es el alimento principal hasta el año, combinado con otras comidas.
La Organización Mundial de la Salud recomienda continuar con la lactancia materna más allá de los 2 años.
El amamantamiento protege a los niños de las infecciones intestinales, neumonías, bronquiolitis, otitis y otras que pueden ser muy graves. Disminuye el riesgo de padecer enfermedades como asma, eczema, alergias, diabetes, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria intestinal crónica. También reduce el riesgo de anemia y obesidad.
Como los bebés se enferman menos, la mamá necesita tomarse menos licencias.
La lactancia también beneficia a la madre porque la protege del cáncer de mama y ovario, de la depresión posparto, anemia, hipertensión, osteoporosis y artritis reumatoidea. Más información acá
Y, quizás el motivo más importante: seguimos amamantando porque queremos hacerlo, lo disfrutamos y queremos sostenerlo mientras así sea, más allá de los innumerables beneficios físicos y emocionales, ¡la lactancia hace felices a nuestros bebés y a las madres!
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