La lactancia materna es fundamental para la salud bucodental.

La leche materna es un fluido de gran complejidad biológica, protege activamente y es inmunomoduladora. Sus componentes y su acción fisiológica explican que la leche materna en sí misma no es cariogénica sino más bien todo lo contrario, previene el desarrollo de caries.

Sin embargo es muy frecuente ver como a muchas madres se les recomienda equivocadamente destetar de manera precoz a sus hijos, alegando que la culpable de la presencia de caries es la leche materna.

El efecto protector de la lactancia materna aumenta en proporción directa con su duración. A pesar de los prejuicios culturales de nuestra sociedad, la lactancia materna más allá de los 2 años sigue teniendo beneficios tanto para la madre como para el niño y muchas madres eligen esta opción natural que por otro lado era la norma biológica hasta el siglo pasado.

Para poder disipar dudas, compartimos un informe muy interesante de la Comisión de Lactancia Materna de la Asociación de Pediatría de España, donde podrán leer:
– cómo se produce la caries
– los factores de riesgo implicados
– la importancia de la leche materna, su composición rica en elementos que favorecen la remineralización y sus factores de defensa.
Es muy importante asegurar una buena higiene de los dientes del niño amamantado desde que las piezas dentarias aparecen en la boca:
– Cepillado de los dientes: la madre, padre o adulto a cargo realiza la higiene de los mismos suavemente, por lo menos dos veces al día, preferiblemente por la noche. De esta manera se asegura que el niño se acueste con la boca limpia de placa bacteriana y restos alimentarios. Amamantar por la noche no causa caries dental.

Algunos niños amamantados desarrollan caries dental, pero no es porque amamantan, ya que la leche materna no es cariogénica.

La leche materna es un fluido de gran complejidad biológica, protege activamente de la aparición de caries a través de diversos elementos influenciando positivamente la salud bucodental, posee:
– factores de defensa que inhiben el crecimiento bacteriano
– minerales que favorecen a la remineralización de las piezas dentarias
– su pH es adecuado (el pH de la leche materna oscila entre 7.1 y 7.7 y no ácido como otras leches) y además posee sistemas que favorecen un aumento del pH, propiciando un medio donde disminuye la desmineralización dentaria.
– aumenta la secreción de saliva que es un elemento de defensa natural.

La ausencia de lactancia materna además aumenta los riesgos sobre la salud bucodental, entre ellos se altera la función succión-deglución-respiración, al no haber un desarrollo adecuado de la musculatura. También interfiere en la maduración de futuras funciones orales aumentando el riesgo de deglución atípica, respiración oral, disfunción masticatoria, dificultades en la fonoarticulación del lenguaje, etc.

Afirmar que la lactancia materna produce caries, sin una base científica concluyente, desprestigia los beneficios de la lactancia, culpabiliza a las madres que eligen seguir amamantando más allá de los dos años y desanima a otras de continuar haciéndolo, mal asesoradas por los propios profesionales o presionadas por una razón que carece de justificación, dejando así de disfrutar de todos los beneficios que tiene la lactancia pudiendo continuar hasta que la madre y el niño quieran.

Nota completa: «Lactancia materna y caries«, Asociación Española de Pediatría