Si estás encaminada a dejar las pezoneras, las siguientes estrategias te pueden ayudar:

  • Probá quitarte la pezonera después de la toma, cuando el bebé está lleno, somnoliento y sigue prendido. Muchos bebés abren la boca en busca del pezón sin abrir los ojos, lo cual puede facilitar la aceptación del pecho. Es posible que entonces el bebé se agarre al pezón sin pezonera la próxima vez, ya despierto, o puede que haya que repetir el cambio varias veces en medio de una toma.
  • Probá quitarte la pezonera en medio de la toma. Elegí un momento de tranquilidad para hacerlo. Si el bebé se muestra contrariado, dale lo que quiere y probá de nuevo más tarde. Si el bebé es mayor, puede que necesites esperar uno o dos días entre intentos. Probá enjuagarte el pezón y la areola. Si el bebé está acostumbrado al sabor neutro de la pezonera de silicona, puede que al principio le moleste el sabor de la piel materna.
  • Cubrí el pezón y la areola con tu leche para hacerlos más atractivos.
  • Tal vez tu bebé necesite tiempo para acostumbrarse a mamar sin la pezonera.

No cortes la punta de la pezonera poco a poco. Queda un borde afilado cuando es de silicona.

fuente: El arte femenino de amamantar, Liga de La Leche Int’l, Cap 18 “Apoyo técnico”