La bronquiolitis es una enfermedad que consiste en la inflamación aguda de las vías aéreas inferiores. Afecta principalmente a los lactantes, en particular a los menores de 6 meses, y es más frecuente en las épocas con bajas temperaturas. Es una causa habitual de hospitalización de niños menores de un año. El agente etiológico más frecuente de la bronquiolitis es el Virus Sincicial Respiratorio (VSR), causante del 60-80% de los casos. 1
Otros virus que pueden causar bronquiolitis son: Adenovirus, Rinovirus, Metapneumovirus humano, Influenza y Parainfluenza.

El tratamiento de la bronquiolitis aguda se basa fundamentalmente en las medidas de soporte (alimentación, oxigenación, control de la temperatura, aspiración de mucosidad), ya que representan el único tratamiento que ha demostrado ser efectivo. El uso de fármacos no ha ofrecido resultados de recuperación significativa en los pacientes.2

La lactancia materna protege contra las infecciones respiratorias de vías bajas y reduce el riesgo de hospitalización por VSR.

Se ha observado que la protección conferida por la alimentación con leche humana aumenta si la lactancia materna se prolonga más allá de 4 meses. Esta protección se debe a los factores inmunológicos que posee la leche materna, que incluyen entre otros, inmunoglobulinas A y G e interferón. Se ha comprobado que la leche humana inhibe al VSR.3

Diversas investigaciones mencionan que la leche humana brinda protección frente a gérmenes como Sincitial respiratorio, Rinovirus, Haemophilus influenzae y Neumococo, con una duración de hasta 2 años después de suspendida la lactancia materna exclusiva, lo que es particularmente importante en la otitis media y neumonías. Estudios realizados en Suecia, por ejemplo, aportan entre 5 y 10 años de protección inmunológica en el caso de Haemophilus influenzae.4

La duración de la lactancia materna (exclusiva o mixta) se asocia a una mejor evolución en la recuperación de los pacientes, menor duración de la oxigenoterapia y la hospitalización, cuando éstas han sido necesarias.3

La leche materna es indiscutiblemente el alimento que un bebé necesita de manera exclusiva durante los primeros seis meses de vida. Además de proporcionarle todos los nutrientes necesarios para crecer, es una barrera que le brinda protección extra contra todo tipo de infecciones y enfermedades.

– Departamento de Enlace Profesional –